Lifting facial

Especialistas en cirugía facial en Valencia

Lifting facial

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Especialistas en lifting facial en Valencia y Albacete

Aspectos generales

Con el paso de los años, la piel del rostro pierde su tono y su firmeza, generándose surcos y pliegues en relación con la redundancia cutánea, la atrofia de los depósitos naturales de grasa y la debilidad de los ligamentos faciales. Estos rasgos aparecen como consecuencia natural del envejecimiento, y pueden agravarse por diversos factores como la exposición solar, el consumo de tabaco, o el estrés, entre otros.

 

El lifting facial, también conocido como ritidectomía o estiramiento facial es una técnica quirúrgica de rejuvenecimiento que permite mejorar el tono y la tensión de la piel, los ligamentos y los músculos del rostro y del cuello. Durante la intervención se elimina la piel sobrante, y se retensan los ligamentos y músculos a través de unas incisiones que quedan cubiertas por el pelo y camufladas en el borde de la oreja y detrás de ella.

Los signos de envejecimiento que un lifting facial puede restaurar incluyen:

  • Piel caída y flácida en el rostro.
  • Líneas de pliegues profundos entre la nariz y las esquinas de la boca.
  • Ptosis o caída de volumen facial, y su deficit.
  • Piel flácida en sus mejillas y/o mandíbula (papada).
  • Piel caída y grasa adicional en su cuello que genera un efecto «doble barbilla».

Los liftings faciales se consideran cirugías restaurativas cosméticas y no pueden cambiar fundamentalmente su apariencia ni detener el proceso de envejecimiento. Tampoco pueden tratar arrugas superficiales, daño solar o irregularidades en el color de su piel. Los liftings faciales son cirugías muy individualizadas que son únicas para la cara de cada persona y sus objetivos de resultado.

Tipos de lifting facial

Aunque este procedimiento es comúnmente conocido con el nombre de lifting facial, existen variantes del mismo que implican el tratamiento de distintas regiones de la cara y el cuello.

  • Lifting cervicofacial: Esta técnica permite tratar la flaccidez, los pliegues y arrugas tanto del rostro como del cuello. Las incisiones realizadas comienzan en la sien, donde quedan disimuladas por el pelo, se extienden hacia la oreja, camuflándose a lo largo del límite de ésta, y posteriormente, por detrás del lóbulo hasta el cuero cabelludo, donde también quedan ocultas por el pelo.
  • Lifting facial: Con esta técnica se trata únicamente el rostro, sin abordar el cuello. Su indicación frente a un lifting cervicofacial puede justificarse por tener el paciente un cuello con una piel de buena calidad, sin arrugas ni pliegues importantes, o por la preferencia personal del paciente. Las incisiones son similares a las del lifting cervicofacial, sin la extensión posterior que precisa el abordaje del cuello.
  • Lifting facial medio: Una cirugía de lifting facial medio aborda especialmente el área de las mejillas. Con esta técnica, se reposiciona la grasa y se tensa la piel del área de la mejilla.
  • Mini-lifting facial: Esta técnica es una cirugía más rápida y menos invasiva que otras opciones de lifting facial, aunque se basa en los mismos principios técnicos. Esta técnica tiene mayor indicación en personas jóvenes, que solo tienen signos tempranos de flacidez facial.
  • Lifting cervical: Con esta técnica se trata únicamente el cuello, sin abordar la cara. Igualmente, esta técnica puede estar indicada en pacientes que presenten un cuello envejecido, sin que las arrugas de su rostro sean tan marcadas como para justificar la necesidad de realizar un lifting facial.
  • Lifting de cejas: Las consecuencias del envejecimiento producen un descolgamiento de la región localizada entre la sien y el párpado superior, produciendo una caída del borde lateral de la ceja, ocasionando en el rostro y especialmente en la mirada un aspecto triste y envejecido. El lifting de cejas es una técnica que permite mejorar la posición y forma de las cejas, y corregir esa caída asociada a la edad. La cirugía consiste en una resección de la piel sobrante a través de una pequeña incisión que queda camuflada en el borde del pelo de la ceja, o en una arruga frontal.

Es muy frecuente la asociación del lifting facial o cervicofacial con la liposucción de la papada, para optimizar los resultados y obtener una mejoría del contorno facial aún más marcada.

En ciertos casos, es posible recurrir a la lipoescultura, o infiltración de grasa propia del paciente para proporcionar volumen a regiones de la cara que por el paso del tiempo han perdido su volumen natural, mejorando los resultados del lifting.

 

Las técnicas que suelen combinarse con la cirugía de lifting facial son:

  • Blefaroplastia (levantamiento de párpados).
  • Rinoplastia (cirugía de nariz).
  • Implantes faciales.
  • Lifting de cejas.
  • Lifting facial líquido con rellenos dérmicos inyectables.
  • Rejuvenecimiento de la línea de la mandíbula.
  • Peeling químico o resurfacing con láser.

¿Quién es un buen candidato a una cirugía de lifting facial?

En general, eres un buen candidato para la cirugía de lifting facial si:

  • Presentas un estado de salud adecuado y no tienes una condición médica que afecte la capacidad de tu cuerpo para sanar.
  • No fumas.
  • No padeces ninguna patología mental y tienes expectativas respecto a los resultados del lifting facial.

Los mejores candidatos para la cirugía de lifting facial son aquellos pacientes que tienen signos de envejecimiento facial, pero que aún tienen cierta elasticidad en la piel. En general, esto incluye a pacientes que tienen entre 40 y 60 años, aunque personas más jóvenes o mayores que ese rango a veces pueden ser buenos candidatos para la cirugía.

¿Cuándo recurrir a rellenos faciales y cuándo al lifting?

Existen múltiples técnicas de rejuvenecimiento facial centradas en recuperar el volumen y el tono de la piel de la cara, pero los más empleados y los que obtienen los mejores resultados son el lifting facial y los rellenos con ácido hialurónico.

 

Los rellenos con ácido hialurónico permiten tratar pacientes que presenten signos de envejecimiento leves o moderados. Sin embargo, en los casos que presentan signos de envejecimiento más marcados, la infiltración de rellenos no permite obtener resultados satisfactorios, existiendo el riesgo de utilizar demasiado producto para sobrecompensar los defectos existentes, obteniendo resultados desagradables y poco naturales. En estos casos más severos estaría justificada la realización de un lifting facial.

 

Por estos motivos, a la hora de someterse a un tratamiento de rejuvenecimiento facial, es imprescindible ser valorado por un cirujano plástico que maneje las técnicas de infiltración de rellenos con ácido hialurónico y el lifting quirúrgico. De lo contrario, si el médico que realiza la valoración sólo es capaz de utilizar una de las técnicas, y no opta por derivar los pacientes que necesiten cirugía a otros especialistas, existe el riesgo de exponerse a indicaciones forzadas e inadecuadas y resultados subóptimos.

¿Cómo es la recuperación tras un lifting facial?

Un lifting facial es un procedimiento complejo que requiere una habilidad quirúrgica excepcional, pero el proceso de recuperación es sorprendentemente rápido para la mayoría de los pacientes. Después de un lifting facial estándar, los pacientes suelen volver a sus actividades diarias normales después de aproximadamente 2 semanas (el ejercicio intenso tendrá que esperar alrededor de 4 semanas) y estos plazos de tiempo suelen ser aún más cortos después de un mini-lifting facial. Dado que la cicatrización de cada persona puede evolucionar de manera distinta, a lo largo del seguimiento, proporcionamos instrucciones detalladas adaptadas al proceso de recuperación de cada paciente.

 

Una de las preocupaciones principales que tienen los pacientes después de un lifting facial es cuánto tiempo tardarán en verse presentables después del procedimiento, y es comprensible, ya que a diferencia de una cirugía mamaria o corporal, por ejemplo, no se puede cubrir fácilmente la zona con ropa. Los hematomas y la hinchazón son normales después de un lifting facial y alcanzarán su punto máximo alrededor de 2 días después de la cirugía. Después de eso, los hematomas y la hinchazón mejorarán gradualmente y deberían ser difíciles de notar después de unos 10 a 14 días. Aun así, muchos pacientes se sienten cómodos saliendo en público alrededor de una semana después del procedimiento. Además, a partir del momento en que se retiran los puntos, que suele tener lugar entre los 7 y 10 días, es seguro usar maquillaje para camuflar cualquier moratón residual.

 

A medida que se recupera la rutina habitual después de un lifting facial, es especialmente importante proteger el rostro del sol. Será más vulnerable a las quemaduras solares durante varias semanas después de la cirugía, además de que mantenerse alejado del sol ayudará a que las cicatrices se curen de la manera más discreta posible. Resulta aconsejable utilizar cobertura física, y sobre todo, aplicar protector solar regularmente, incluso en días nublados.

Nuestra filosofía en el lifting

Nuestro objetivo a la hora de realizar un lifting es mejorar la apariencia y ofrecer un rejuvenecimiento natural y armónico del rostro y del cuello, evitando modificaciones que puedan suponer un cambio excesivo en la identidad facial de nuestros pacientes. Además, limitamos la agresividad de nuestras técnicas, para evitar resultados exagerados de caras estiradas que pese a obtener una mejora importante de sus arrugas, pueden quedar con un aspecto artificial.

Si deseas rejuvenecer tu rostro en Valencia, puedes solicitar cita con los Dres. Elena García Vilariño y Enrique Salmerón González, para obtener una valoración personalizada de tu caso y recibir información detallada de todo el proceso haciendo click aquí.

 

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